Revista leer
Revista leer
Edición impresa

La vida desbordante de Alfredo

Alfredo2

A prin­ci­pios de 2008 le con­taba Alfredo a José Luis Gutié­rrez, y así quedó dicho en las pági­nas de LEER, que tenía idea de hacer unas memo­rias, con poco texto y mucho dibujo, “por­que lo mío no es escri­bir”. Casi diez años des­pués ese libro es una reali­dad extra­or­di­na­ria en fondo y forma, como su pro­ta­go­nista y artí­fice, que ade­más con­tra­dice su modes­tia con las pala­bras y que ha moti­vado una expo­si­ción en el Museo ABC de Madrid que hasta el 11 de junio acoge la mitad de los cerca de 200 dibu­jos que con­for­man el libro.

Nos cita­mos allí con Alfredo y su edi­tor, Mau­ri­cio d’Ors, y con Adriana Huarte, que ha desem­pe­ñado la tarea de pasar a lim­pio los ya de por sí pul­cros folios manus­cri­tos del dibu­jante astu­riano, cuya pre­ciosa cali­gra­fía ilus­tra las guar­das de este librazo que merece toda aten­ción más allá de lo efí­mero de una mues­tra que tras su paso por Madrid pro­ba­ble­mente recale en algún otro lugar –se vis­lum­bra Gijón para 2018–. Vemos expues­tos los ori­gi­na­les de estos dibu­jos que como todos los de Alfredo rebo­san, se des­bor­dan, toda­vía con el aliento infan­til que le ani­maba cuando embo­rro­naba con tiza el ence­rado de la escuela rural de Agüe­ria. Lo dice Felipe Her­nán­dez Cava en el estu­pendo pró­logo del libro, citando a José Jimé­nez: pin­tar como un niño es lo más difí­cil por­que “implica tener un espí­ritu abierto y, sin embargo una cons­truc­ción plás­tica muy compleja”.

18121583_261529664311073_2293973027085400524_oEmo­cio­nan pre­ci­sa­mente las estam­pas de la infan­cia. Alfredo dejó el pue­blo con 13 años, pero es astu­riano y allí la impronta de la tie­rra es inde­le­ble. Así el parto de la xata, o el pequeño cuarto junto a la esca­lera de la casa donde estaba la camina de madera en la que dor­mía el guaje Fre­dín, en una com­po­si­ción que recuerda al dor­mi­to­rio arle­siano de Van Gogh. O la “ven­tana de atrás” del título que era “mi rin­cón favo­rito”, “mi puerta de salida al mundo, mi escape, mi paraíso”. O las visio­nes del tren car­bo­nero, la máquina fas­ci­nante que mar­caba la vida del lugar. Todo en torno al car­bón: el tren y el Río Negro que bajaba con el color de su nom­bre des­pués de lavar todo el mine­ral de las minas río arriba. Y negros e ilu­mi­na­dos en rojo son los dibu­jos de estas des­me­mo­rias, en acer­tada deci­sión edi­to­rial que da uni­dad a esta obra mara­vi­llosa que nos lleva con Alfredo al cole­gio domi­nico en Nava­rra, al novi­ciado palen­tino, a los estu­dios de Filo­so­fía y Teo­lo­gía en Sala­manca y luego a Madrid, donde a los 25 col­gará los hábi­tos y des­pués de varios aza­res empe­zará en serio con el dibujo gra­cias a la publicidad.

La his­to­ria es extra­or­di­na­ria, y Alfredo la pre­senta con una sin­ce­ri­dad des­ar­mante. Como cuando deta­lla sus ava­ta­res pro­fe­sio­na­les al apro­xi­marse la edad de jubi­la­ción. “De manera casi imper­cep­ti­ble fue­ron dis­tan­cián­dose las lla­ma­das tele­fó­ni­cas y las ofer­tas de tra­bajo, hasta que ya no llamó nadie”. Y uno no entiende que tanta ilus­tra­ción vigente, pres­ti­giada e inane se per­mita vivir de espal­das a este maes­tro indis­cu­ti­ble.

BORJA MARTÍNEZ (@borjamzgz)

La "mi camina" de Alfredo en su casa de Agüeria, uno de los dibujos de sus "desmemorias", 'La ventana de atrás' (Treseditores).
La «mi camina» de Alfredo en su casa de Agüe­ria, uno de los dibu­jos de sus «des­me­mo­rias», “La ven­tana de atrás” (Treseditores).

 

Casas tor­ci­das

Gon­zalo Pernas

¿Por qué faes les cases tor­cíes?, solía pre­gun­tar la madre de Alfredo cuando, de visita en Madrid, echaba un vis­tazo a los dibu­jos de tan extra­va­gante hijo. Y cierto es que las escora, y que ha des­pro­por­cio­nado miem­bros de falan­gis­tas, de hom­bres de Dios y hasta de fami­lia­res y ami­gos. Hasta le puso –hace ya muchos años– que­ve­dos rojos y psi­co­dé­li­cos a un domi­nico men­te­cato. Humilde, Alfredo Gon­zá­lez (1933) dice dudar, temer a la car­tu­lina, y quizá por ello se alió con el blanco desde el prin­ci­pio: tanto le vale para estre­llar un cielo en nega­tivo como para con­se­guir un curioso “efecto muche­dum­bre”, y hasta para tra­zar unas olas par­ti­cu­lar­mente rea­lis­tas en un dibujo poco suyo y extra­ña­mente orien­ta­loide. Museo ABC ha reunido cien de las ilus­tra­cio­nes que La ven­tana de atrás com­pila, cele­brando la madu­rez del artista solo, que no es otro que el que ha tras­cen­dido ya las eti­que­tas, supe­rado las cri­sis artístico-identitarias que for­jan los esti­los, acep­tado la dis­con­for­mi­dad cró­nica del artista genuino.

La expo­si­ción sigue un hilo vital que nace evi­den­te­mente en la infan­cia de su pro­ta­go­nista. Parte de un mundo de zue­cos y ori­na­les, de borra­chos arras­tra­dos por viu­das, hacia el pre­sente. Pasa por la bohe­mia famé­lica a la que Alfredo no quiso per­te­ne­cer, quizá por­que enton­ces se podía ele­gir tal cosa; era posi­ble dibu­jar para el ramo publi­ci­ta­rio y pagar –bien que mal– las fac­tu­ras. Pasa por el otro lado del charco, norte y sur, reco­giendo las anéc­do­tas de un dibu­jante sui géne­ris y pue­ble­rino en el mejor de los sen­ti­dos. La mirada fresca del pár­vulo dís­colo pin­ta­cu­ras se man­tiene. Las facha­das neo­yor­qui­nas, en efecto, se aba­ten sobre las ace­ras, o sobre un negro enorme, o sobre una poli­cía gri­tona que difí­cil­mente sabrá nunca, si es que sigue entre noso­tros, que su retrato se colgó a casi seis mil kiló­me­tros de la ciu­dad de los sue­ños. No cabe duda de que el hom­bre de la línea negra y la man­cha roja ha rodado, y mucho, a pesar de que hable de “des­me­mo­rias” en su monográfico.

17457421_243272476136792_4096825800013642102_n

Se men­tan algu­nas de sus influen­cias, trans­pa­ren­tán­dose alguna que otra en la obra expuesta, tal como es el caso del gran Saul Stein­berg (1914–1999). Un puñado de cole­gas alfre­di­za­dos com­parte rin­cón con unas pocas figu­ras, some­ti­das a idén­tico tra­ta­miento, y no tar­da­mos en cons­ta­tar que, efec­ti­va­mente, son fami­lia­res del astu­riano. Ahí están Peri­dis, Ballesta, Umbral y algún otro his­tó­rico. Y esos suyos, al pare­cer, en momen­tos cru­cia­les de sus exis­ten­cias. Queda la vitrina alar­gada, con fotos e ilus­tra­cio­nes con­te­ni­das en libros, y se des­cu­bre a un Alfredo menos roji­ne­gro (esos colo­res tan de pos­gue­rra) y más pre­cio­sista. Cabe infe­rirlo de la ciu­da­dela que ilus­tra Rosa y Azul (Sed­may, 1977) y de sus torres menos tor­ci­das, o del mapa –tam­bién a doble página– que con­creta la Teo­ría de Madrid (Espasa, 1980); libros de Bor­ges y el ya citado Paco Umbral, que sen­tía por el dibu­jante des­me­mo­riado la sufi­ciente estima como para con­si­de­rarlo un “Durero under­ground”.

Pre­ci­sa­mente en esa vitrina vi una foto de Alfredo Gon­zá­lez en la puerta de su taller, y enton­ces supe que este hom­bre era el habi­tante del espa­cio mágico que una puerta metá­lica sepa­raba de la calle, doblando la esquina de la pana­de­ría, a unas dece­nas de metros de la torre mons­truo­sa­mente tiesa en la que crecí. Alguna vez la vi entre­abierta e intenté curio­sear infruc­tuo­sa­mente el inte­rior o, al menos, tales cosas me dic­tan los recuer­dos –tan malea­bles– de un niño dibu­jante. De lo que no me cabe duda es de cómo me pre­gun­taba que sería lo que este señor ponía sobre la mesa para decirle a ese vacío temi­ble de la car­tu­lina, como él mismo dice, ¡aquí estoy yo! Casi tres déca­das des­pués lo he des­cu­bierto. Cau­sa­li­da­des de la vida que, más allá de esta licen­cia bio­grá­fica, me con­mi­nan a reco­men­dar La ven­tana de atrás, el libro homó­nimo y el uni­verso tor­cío que una y otro representan.

PORTADA283
Una ver­sión de estos artícu­los apa­rece publi­cada en el número de junio de 2017, 283, de la Revista LEER

Daftar Akun Togel IDN dengan Pasaran Hongkong dan Hadiah Besar

Sebagai Togel IDN kami menunjukkan bahwa pemain diundang untuk mendaftar atau membuat akun di situs kami yang dikenal sebagai IDN. IDN adalah platform yang berbasis di Indonesia atau yang secara khusus melayani pemain dari Indonesia. Proses pendaftaran di situs kami melibatkan pengisian informasi dasar dan verifikasi untuk memastikan keaslian pengguna. Togel Online menawarkan pasaran Hongkong, yang merupakan salah satu pasar togel paling populer dan terpercaya di dunia. situs kami menjanjikan hadiah yang signifikan bagi para pemenang. Hadiah besar ini bisa anda dapatkan dengan mudah.

Tentukan nomor togel Anda dengan analisis dan strategi khusus. Periksa frekuensi kemunculan nomor, hasil sebelumnya, dan pola. Gunakan rumus pribadi atau ikuti prediksi ahli. Strategi populer seperti Angka Mistik, Angka Index, dan Angka Hoki, dapat menjadi panduan dalam memilih nomor togel. cuman di Bandar Togel Terpercaya Yang akan kamu temkukan bocoran angka.

Bergabung dengan bandar togel resmi dapat membuka peluang besar bagi pemain untuk memenangkan Bo Togel Hadiah 2d 200rb di tahun 2024. Pemain dapat menikmati berbagai keuntungan, termasuk sistem pembayaran yang aman dan proses klaim kemenangan yang mudah.

Slot Gacor Gampang Menang: Rahasia di Balik Jackpot

Slot gacor adalah istilah yang sering digunakan untuk menggambarkan Slot88 yang memiliki frekuensi menang yang tinggi, membuat pemain merasa lebih beruntung saat memainkannya. Keberhasilan dalam permainan slot ini tidak hanya bergantung pada keberuntungan, tetapi juga pada pemilihan mesin yang tepat dan strategi bermain yang efektif. Banyak pemain percaya bahwa mesin yang telah memberikan kemenangan besar dalam waktu dekat mungkin lebih cenderung untuk memberikan jackpot lagi.

Related Links:

Togel178

Pedetogel

Sabatoto

Togel279

Togel158

Colok178

Novaslot88

Lain-Lain

Partner Links