La Gran Diosa y la Vieja Europa
La publicación en castellano de Diosas y dioses de la Vieja Europa, el revolucionario trabajo escrito en 1974 por la profesora Marija Gimbutas (1921–1994), data de 1991, tras haberse publicado en Ediciones Istmo, traducción de Ana Parrondo e introducción de José M. Gómez-Tabanera, respetadas íntegramente en esta edición en generoso formato de Siruela.
Su aparición supuso un auténtico fenómeno que trascendió los límites de la arqueología, adentrándose en el territorio del gran público e incluso en el universo de la mitología pop. El universo cultural que analiza Gimbutas de la Vieja Europa (un término introducido y popularizado por ella) comprende una serie de horizontes culturales que van desde el 7000 al 3500 a. C. en el sureste europeo, en las regiones del Adriático, el Egeo, los Balcanes centrales y orientales, Moldavia, Ucrania occidental y Danubio medio. Los diferentes grupos humanos de este vasto espacio desarrollaron una identidad colectiva y unos logros muy superiores a sus vecinos occidentales y norteños en el periodo Neolítico-Calcolítico.
Para la investigadora de origen lituano, el universo de figuraciones femeninas, posiblemente de carácter ritual, surgido en estas comunidades mayoritariamente agrícolas, eran expresión de un concreto ideario religioso de fundamentos “maternos”, con los mitos y dramas propios de cada estación.
Cuando se contemplan las más de doscientas cincuenta ilustraciones de este libro maravilloso e inclasificable se asiste a un profundo misterio. No es la Tierra, sino una hembra humana la que es capaz de transformarse en multitud de criaturas y que toma forma como Gran Diosa que emerge milagrosamente de la muerte. Sin paliativos: un clásico y un libro venerable.
JUAN LUIS PUENTE